miércoles, 30 de septiembre de 2009

Para mí la desgracia del estudiante, entre otros indicadores igualmente efectivos, podría ser medida por el peso de su mochila.
Si se hiciera una escala del 1 al 10, en orden creciente, yo ando en 8 kg de absoluta y desesperante desgracia estudiantil.

La puta que los parió a todos.


Mitoescoliosis.

sábado, 26 de septiembre de 2009

farmacología clínica y la destrucción del autoestima


Ahí está….desde acá lo veo….se está escondiendo pero no lo consigue….su rulo negro asoma por entre los papeles con los que se cubre…
Es más inteligente de lo que yo pensaba…apunta a la tortura psicológica, pues no es su idea esconderse del todo, ya que si así fuera me sería mucho más fácil olvidarlo de una buena vez…pero tiene esta maldita forma de recordarme que está ahí…a fin de someter, controlar y quebrantar mi resistencia a acercarme a el..

Ahí…arriba del escritorio al acecho…vigilándome…para que en ningún momento consiga evitarlo…
Me rindo…lo agarro a los tirones, lo maltrato un poco, puteo, miro para todos lados…no quiero estar con él!! Lo tiraría bien lejos…pero estoy atada…soy su esclava…no puedo tirarlo..y lo sabe…sabe que mi parcial depende de él…
Es más…lo disfruta…porque no hay nada que le haga sentir mas placer que mi dependencia…
Miro para otro lado,lo vuelvo a tirar por ahí, busco cosas para hacer quiero liberarme de esa presencia..pero como siempre…
Pierdo la libertad ante un libro de mierda…pierdo la libertad y caigo de rodillas ante “el hombre bueno” o el “goodman”…
Gana la batalla…y por si no alcanzara con esto al abrir sus páginas encuentro la letra más chica del mundo…que habla de experimentos de “ovocitos de Xenopus” y de “vejiga del lenguado” …y un germinadero de nombres de fármacos que se usan en Estados Unidos,…pues claro está que la mitad de los fármacos que se nombran en este hermoso libro no existen en Uruguay…o existen y no se usan o directamente no los puedo pronunciar…
(lo juro, pag 755)…
Interesantísimo..
Y como tiempo nos sobra…porque nadie me puede decir q estamos estresados de parciales, si la vida es una papa!! Me pongo a leer la vejiga del lenguado y cierro la boca…total…después me olvido de toda esta colección de nombres en inglés…asi alguien , alguna vez puede acusarme de mala praxis…hay que ponerle picante a la historia…
Me pregunto si alguna vez…por esas casualidades de la vida…el señor de la foto de arriba habrá sido consciente de lo mucho que nos cago la vida con su libro torturador…pero al instante me doy cuenta de que no…porque si asi fuera…el goodman y gilman sería un best seller….

jueves, 24 de septiembre de 2009

Trasporte colectivo.


Son las 16:30 de una tarde de sábado. El 151 Verdisol acaba de agarrar Colonia y se dirige derechito hacia Rondeau, donde doblará para tomar Libertador y darse de bruces contra el Palacio Legislativo. El ambiente no es otro que el de un sábado por la tarde: Hay algún que otro padre con sus hijos vestidos de cumpleaños y una bolsita por la que sobresale una moñita roja. Hay unas cuantas viejas con pinta de ir a visitar a alguien. Hay ausencia de hinchas de algún cuadro de fútbol, porque se bajaron todos en Avenida Italia y Centenario.
Curiosamente, no hay partido en la radio. O bien no anda, o bien el conductor es una excepción entre los de su clase. La ausencia del relato futbolístico agrega dos cosas al ambiente de transporte colectivo: gente con auriculares que hace gestos cada vez que (probablemente) su cuadro la caga y silencio. El silencio sea, quizás, la característica más notable.
O quizás la noté yo, en ésta mi nueva etapa de persona sin MP4. Me di cuenta de que hacía un par de años que mis oídos no apreciaban en silencio en un ómnibus. Silencio, en realidad, es un decir. Siempre está el ruido estridente del vehículo, alguna bocina, alguna charla de fondo, lejana. Pero únicamente monótono ruido, nada de canciones o relatos para hilvanar. Me aburrí un poco, pero me pareció tranquilizador. Cerré los ojos y ni siquiera noté cuando ella se sentó a mi lado. Sí, ella, la del celular anaranjado.
Yo creo que todas las personas, al menos las que como yo no estaban enchufados a sus aparatitos de música, estaban en el mismo estado. Tranquilas, mirando por la ventana un día hermoso.
¿Qué podría sacarlos de aquella calma? ¿Qué podría hacerlos girar la nuca, voltear sus cabezas y poner caras diversas? Caras que andaban entre la sorpresa, el asombro, la vergüenza, el asco e incluso la risa. ¿Qué podría sacar a un uruguayo perezoso de su estado adormecido preferido y dejarlo como si acabara de contemplar al mismísimo diablo? ¿Y qué podría dejarlos a todos mirándose, después de pasado el asombro, con ganas de tirarse por la ventana y pensando todos juntos "no puede ser"?
Ella lo sabía. Ella. La del celular naranja, sentada atrás del todo junto a su madre, al lado mío. Ella, que apretó aquel botón una vez que el volumen estuvo al máximo, y de su celular salió vomitada, como si fuera alquitrán chorreando por aquellos diminutos parlantes:
"Cooooooooo-laaaa-teee un dedo cabezona, colate un dedo cabezona"
Mitocondria, la que se tapó la cara el libro.

lunes, 21 de septiembre de 2009

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Señora de las siete décadas.

Ella llamó a casa. Dijo que una amiga de ella lo encontró y que se lo dio a ella porque solía trabajar en un servicio de mensajería y conoce mucho la zona y su gente. Que se llama Pepa (no se llama Pepa, pero prefiero mantener oculta su identidad verdadera (?)) y que si yo me acercaba a las 15:00 al club de jubilados que está a una cuadra de mi casa, ella me lo daba.

Y fui. A las 15:00 exactas estuve en el lugar. Entré. Todo era de viejos: La habitación de la derecha, con un cuadro enorme de Gardel, una estufa a leña gigante, una mesa de vidrio plagada de botellas a medio tomar de grappamiel y licores varios, varios sillones y unas cuantas sillas. Desde ahí salía el ruido de una radio mal sintonizada. En otro lado se oían voces, muchas voces.

Yo me acerqué, y ahí estaban: veinte ancianos de entre 60 y 100 años. Estaban re copados conversando y a mí me dio cosa interrumpir, además de vergüenza. Le pregunté a un señor que estaba contra la puerta si tenía idea de quién era Pepa.

- ¿Pepa? - me dijo a mí, y luego le gritó al grupo - ¿Pepa ya llegó?

Y todos contestaron a la vez, hablando sobre el otro, que "no llegó, ¿te dijo si viene?, debe estar al llegar, quedate por acá, ¿para qué la buscás?"

- Perdí una billetera con documentos y ella la encontró, me llamó y quedamos en que nos veíamos acá para dármela.- Mentí yo. No iba a contarle mi historia patética a gente que podría ser mis abuelos y que seguramente iban a querer consolarme, cuestión que no necesito porque me hace sentir tonta.

Pero una de ellas, que a efectos de esta historia llamaremos Coca, salió conmigo a donde yo planeaba esperar a Pepa (afuera, donde no corriera riesgo de que me capturara esta secta de ancianos borrachos) y me dijo "la perdiste o te la robaron?"
Y tuve que decirle la verdad. Que me la robaron. Por suerte fue suficiente, ella no me preguntó cómo fue (y me ahorró tener que contarle que seguramente una persona perteneciente a su generación apocalíptica me robó las cosas). Le gustó tanto tener algo nuevo de qué hablar que me contó varias historias de robos truculentos interesantísimos, cosas que jamás nunca en mi vida había oído. Yo apliqué una técnica que vengo poniendo en práctica hace años: le puse el piloto automático a mi cara para que haga gestos de horror o profundo asentimiento según corresponda, y mientras tanto pensé en otra cosa.

Coca me dejó libre al fin. Yo, que no tenía ganas de volver a ser capturada, salí del recinto y me quedé afuera, esperando contra una pared. Después de unos diez minutos apareció, en su bici, Pepa. Me hizo adiós desde la calle y me pareció la señora más adorable del mundo. Pero en el fondo, la sospecha seguía haciéndome pensar cualquier cosa. Nos dimos un beso, le dije muchas veces gracias y ella volvió a contarme la historia que yo ya conocía. Después me pidió que le contara cómo me habían robado.

Y mientras lo hacía, su cara me llenó de dudas. Tenía una especie e sonrisa pícara, una ausencia de terror y espanto, que me dio vuelta. ¿Ella? No, ella no puede haber sido. Sería demasiado descaro venir a devolverme esto luego de hacerlo. ¡La amiga! ¿Le habrá dado culpa a la amiga hacerme pasar por todos los trámites de nuevo y le pidió a ella que me la entregue?

Antes, yo no era así. Jamás habría sospechado de un par de señoras adorables. Pero desde que mi abuela me contó lo que le hizo al pobre viejo aquel que se le cayó la bufanda (lo dejó entrar a donde él estaba yendo y le hurtó la prenda), pienso que la tercera edad esconde más maldad de la que aparenta.
Así que volví a mi casa, contenta por haber recuperado mi monedero y mis documentos, pero pensando cómo voy a enfrentar al mundo con esta nueva verdad:

Una vieja con artosis no sólo me robó sino que se dio el lujo de devolverme los documentos.


Mitocondria, mientras pide hora con el psicoanalista.

martes, 15 de septiembre de 2009

Hay situaciones traumáticas que, por más que sean feas, no dejan de ser un recurso anecdótico a usar cuando la ocasión lo amerite. Meses después del suceso, cuando ya pasó y ya fue parcialmente olvidado, hay una reunión con amigos que no veías desde hace bastante tiempo. Y ahí sale ella, la situación: Heroica, salvadora de más de un silencio, seductora. Se queda con la atención de todos, cosecha diversos tipos de caras de asombro y miedo, admiración y espanto.

Los robos pueden caer en esa categoría. Depende un poco de la persona (hay personas que nunca se recuperan, lo sufren para siempre) y del tamaño del robo (hay robos que no son tan genialmente contables). Pero el robo medio, el del empujón, el de la lucha por la cartera, incluso el de la arrastrada en moto (vamos, que yo conozco a alguno y un mes después no se veía en sus caras el miedo, sino las ganas de contar un evento trágico), son perfectos para cualquier velada. Todos tienen una de esas historias. Sean del bando que sean (de los que quieren matarlos a todos o de los que creen firmemente que es posible reformar lo que está mal), a todos les gusta inflarla, maquillarla, agregarle algún golpe donde no hubo, alguna situación de riesgo de vida donde sólo hubo una piña en el estómago.

¿Quién no pasó quince minutos de su tiempo relatando con la mismísima calidad descriptiva de Tolkien cómo aquel vándalo lo acorraló en un callejón y casi muere de un tajo en la yugular? ¿Quién no se enganchó luego a esa historia inicial, para relatar la suya propia con precisiones que nada dejaron que desear al anterior y que lo desafiaron en riesgos y valentías? ¿Quién no estuvo en aquella guerra de miradas, gestos y palabras que se da cuando dos o más personas quieren hablar a la vez, quieren ser los próximos en contar su aterradora historia?

Hay muchos tipos de reacciones cuando uno cuenta lo que le pasó, seguramente tantos como personas haya. Pero de mi reciente experiencia (que tiene cero porcentaje de acción y ciento por ciento de absurda idiotez) descubrí que hay varios grupos importantes de reacciones:

1- "Noooooooooooooooooooooooo, no te puedo creeeeer!!!!" Es muy frecuente. Al principio es difícil discernir entre si lo dicen como una forma de ser condescendiente con uno en la importancia que tuvo el hecho (onda, para no quedar como que no fue importante, sino que es el evento más trágico de tu vida), o si realmente les parece lo más espantoso del mundo. También puede ser que no puedan creer la forma absurda y patética en que te robaron, lo cual sería, en mi caso, la opción más segura a tomar. Ellos no son malos reaccionantes. Son, a mi parecer, los más sinceros. Son los que uno puede usar para descargar su ira y definitivamente convencerse de que nada peor en el mundo puede suceder. Aunque sea por un rato.

2- "Bueno, pero pensá que no te hicieron nada". Mi pregunta es: ¿Esta gente mira a través de ese cristal espiritual todo lo que pasa en el mundo? ¿Esta gente opina que la soja trangénica es buena para el ecosistema porque "bueno, pensá que por lo menos tenemos algo que comer"? ¿Esta gente piensa que la pobreza no es tan mala porque "bueno, por lo menos no están muertos, como en otros lados del mundo"? ¿Desde cuando las cosas de evalúan en función de lo que podrían haber sido? ¡Así todo sería extremadamente malo, o extremadamente bueno, señora! Las cosas son como las vive la persona, y no como podrían haber sido. Sí, también podría haber pasado que en el intento me quebraran todos los huesos del cuerpo. ¿Y? No fue así, ¿porqué tengo que calmar mi sufrimiento en función de algo que, por suerte, no fue?
Es como cuando traés un 8 en el carné, y tus padres te dicen "podría ser mejor". Sí, claro, hasta el 12 siempre puede ser mejor. También puede ser peor, hasta el 1. Pero es un 8, y ese 8 es lo que te provoque él, y nada más.
Todos le decimos esto a la gente. Y es que cuando se trata de otro, realmente sentimos que lo mejor es que esté allí, sano y salvo. Pero eso es para nosotros, y no sirve como consuelo. ¿Desde cuando la gente valora lo que aún no perdió?

3- "Lo peor son los documentos". Ta. Juro que hago el intento para pensar así, para pensar que lo peor no es lo que más vale en dinero. Y te agradezco que me lo digas, aunque no te cree ni tu abuela (sí, esa que te decía que bailabas precioso en las fiestas de fin de año, y todos sabían que eras el niño más chueco de toda la escuela).

4- "Mi tío abuelo Estebaldo decía que cuando perdés o te roban algo, lo que tenés que pensar para no sentirte tan mal es que probablemente esa persona lo necesitaba más que vos" Tu tío abuelo Estebaldo era un pelotudo.

Me las dijeron todas. Y yo las aguanté todas. Muchas las agradecí de corazón. Otras me resultaron inaplicables. Pero mi conclusión final, mi verdad más gigante, es que a pesar de que superé la pérdida material con una velocidad asombrosa, nunca voy a poder superar la ausencia de mi dignidad:

A mí me robó una vieja con artrosis de las que compran bombachas gigantes en Tiendas Montevideo.



Mitocondria, derrotada.

jueves, 10 de septiembre de 2009

Naviades que aterran...a los que piensan...


Siempre odie la navidad…
Nunca fui una niña miedosa…no le tuve miedo a la oscuridad, ni a las películas de terror, no creía en brujas, y en cierta ocasión le robe la merienda al más bruto de mi clase…sin embargo existía algo que me horrorizaba una vez cada año…y año tras año sucedía lo mismo…
Quien lea estas líneas creerá que estoy fuera de lugar, que fui maltratada, o que soy una resentida…pero si señores…mi miedo máximo asomaba el 24 de diciembre….
Cuando él, sin permiso, sin invitación alguna, invadía mi casa…a medianoche, cuando todos dormíamos…
Y podrán tildarme de oligofrénica, pero… ¿ quién en su sano juicio, cree en los regalos sin cargo?
Repito, fui niña, no idiota. Me canse de pedir regalos a mis padres, y todos esos regalos siempre tuvieron un costo extra…”si te va bien..” “si estudias..” “si ordenas el cuarto..” “si sos buena”…
Entonces…siguiendo la misma línea de razonamiento creo tener el derecho a cuestionar a esa persona que sin motivo aparente, llenaba mi estufa de regalos….y sin pedir nada a cambio!!
Por qué no toca timbre? Pregunte un día…
Por qué se mete por la chimenea mamá? Si tenemos puerta!!
Por qué a papá Noel no se le ensucia nunca la ropa?
Por qué no quiere que lo vea?
Por qué me hace regalos si no me conoce? Te cansaste de explicarme que no acepte regalos de desconocidos…que no le abra la puerta a nadie…y ahora…ahora no entiendo…
Una vez un amigo en el jardín me confesó…”papa Noel es MI papá”…que tranquila jugué en el arenero ese día…se había revelado el misterio!! Papá Noel era el papá de Fede!
Pero la tranquilidad duró poco….hasta que llegué a casa y se lo conté a mi mama…
“no nenaaaa! El papá de Fede no es papa Noel!”…y tuvo la brillante idea de llevarme al shopping a visitarlo…ahí fue cuando lo vi….
Lo vi!!! Que emoción!! Al fin estaba cara a cara con quien hubiera sido la alegría de tantos niños…y el único responsable de mis tantos disgustos…
Conforme? No…aun había algo en su mirada que no me daba confianza…y como todo niño que lo que tiene de desconforme lo tiene de perseverante, tome fuerzas y me acerque, e hice la fila…
los ojos de mis congéneres brillaban de alegría, reían y llegado su turno se sentaban en su falda..…pedían y pedían regalos…desde chiquitos sabemos hacer buen uso de la gratuidad..
Cuando por fin estuve cara a cara con papa Noel… (que estaba sentado en una silla mientras sus subordinados preparaban los regalos para el resto del mundo) le pregunte…¿Qué te pedí este año?
Papa Noel sonrió confiado y al instante respondió…
-“una muñeca barbie mijita”
Imposible describir la tristeza que sentí…
Una muñeca!! Nada mas ajeno a mi realidad! Yo quería un camión para cargar arena!! Es con lo que jugamos en el barrio papa Noel!
Lo mire desafiante…lo inspeccione de cerca..su barba no era blanca como el algodón…alrededor de su boca era medio verde medio amarilla…ciertamente no tenía el aspecto de abuelito bueno que yo había visto en la etiqueta de las botellas de coca cola..y en su mal aliento había un dejo de olor a cigarro..pobre papa Noel…que le estaba pasando?
En el camino a casa mamá me pregunto si estaba contenta…
Mama….algún día aprenderás a darte cuenta sola de las cosas? No le quise contar la verdad…no quería que se sintiera mal…desde donde lo vio ella…papa Noel parecía mucho más agradable que de cerca…así que decidí no herir su sensibilidad y cargue sola con el secreto…

No quiero seguir relatando…pues ese 24 de diciembre no me trajo ni muñeca, ni camión…me trajo un carrito de helados y un juego de doctores…para introducirme desde chiquita en el mundo del multiempleo..eso si que está bien..gracias papa Noel…por ser tan realista..

Pero uno crece….
Y la dudas siguen…pero ya son diferentes…estamos marcados por realidades diferentes…
Desde cuando la gente puede respirar tan alto?
Como puede transitar por aires internacionales sin rendirle cuentas a nadie?
Qué suerte que tiene papa Noel, que no paga peajes, no pasa por las aduanas, no hace colas, y no viaja al lado de sudacas…
Evade el tan moderno test de alcoholismo..pero sepan perdonar…es que a esas alturas el espirómetro no es útil…
Evade hasta las más crueles críticas de los defensores de animales…que parecen ajenos al sometimiento de esos pobres 7 renos que cargan además de con el gordo ese con un peso de regalos para todos los niños del mundo…pero eso es otra historia…pues están demasiado compenetrados defendiendo a los caballos que tiran de los carritos de basura….pobres esos caballos….cargan basura y no regalos!!

Será un problema de drogas? … pues.. ¿cómo hace un señor con ese estado físico lamentable para recorrer el mundo en 2 segundos? Nunca te lo preguntaste?
No es que quiera atribuirle la felicidad de la navidad ni el logro del cometido de papa Noel a la cocaína…pero valla que le es útil..igual…igual eso no nos compete, pues el hace bien su trabajo y es en eso en lo que debemos centrarnos..

O eso intenta…
Y llegan las verdades…
Papá Noel es en realidad San Nicolás…
San Nicolás solía vestirse de verde y azul…dicen que provenía de los países nórdicos…
Hasta que fue capturado por Coca Cola, quien le brindó una empresa imperialista, y al haber pasado ya de moda el verde y el azul, implementó el rojo y blanco, (todo gran empresario necesita de buena presencia), nada mas similar a los colores de un triste payaso…que no es ni payaso ni triste, pero si empresario…
Ahora si señores….Papa Noel fue creado… que viva la plusvalía!!
Pero donde se vio una empresa que no posea subordinados?? Si señores…a alguien siempre hay que explotar..
Entonces, además de esta linda empresa…le brindaron unos enanos que estaban de sobra…pero para no agredir la sensibilidad de los consumidores los vistieron de duendecitos..de esta manera quedan más simpáticos..no?
Y así fue creciendo este señor regordete,y junto a él su empresa, a expensas de los enanitos-duendecitos que trabajaban todo el año creando regalos para que en una sola noche…el gordo haga el reparto y se lleve los créditos…recuerden! Estamos hablando de una empresa…y como toda empresa, tiene su cara visible..que es más linda que la de un enano..
Y seguí creciendo..
Pero el alivio nunca llegaba…
Supe la verdad…”papa Noel son los padres” me dijo mi primo..
Realmente quede sin palabras…
Mis padres? Eso si que no lo esperaba…mis padres fomentando esta historia?
Resulta que mi primo que quiso cagar la vida, y lo logró.
Quizás de una forma equivocada, al pensar que rompería mi fe en la magia…
Pero me la cago bien cagada…hubiera preferido odiar simplemente a ese gordo autoritario, pederasta y evasivo…
, que sentir a mis padres cómplices de todo esto…
Y discúlpenme…si me excedo en pensamientos, pero quien se ha sentido libre de no festejar la navidad?

martes, 8 de septiembre de 2009

San Roque, san Roque, que ese sapo ni me mire ni me toque.



Lo cierto es que cuando sos una persona que se pone nerviosa, alterada, histérica fácilmente, la vida no es tan simple. Yo me banco muchas cosas. Y, en realidad, parte de mi esfuerzo diario consiste en bancar muchas más.

Con dedicación le perdí el pánico a que la gente se "chupe" los dientes (cómo se dice eso? alguien se da cuenta de lo que digo?), a las etiquetas que salen desde el cuello de las remeras o cualquier otro tipo de prenda, e incluso a la gente que dice "váyamos"... ta, esa última me produce una especie de escozor y suba de temperatura corporal, pero logro controlar mi ira. Antes me ponía extremadamente nerviosa tener que para el ómnibus. Rezaba con todo mi ser que hubiera más gente en la parada, y que se tomaran el mismo que yo. Uno, aunque sea.


Pero nunca, jamás, voy a superar el tema de los sapos. En general, los animales y yo no tenemos un gran feeling. Yo los aprecio y los respeto, me encantan en la teoría, sé mucho sobre ellos, pero en la práctica mantengo considerables distancias. El día que le dé un beso a un perro el mundo se caerá a pedazos.

Pero con los sapos es algo que va más allá de lo natural. Los odio. Los detesto profundamente. Me dan un miedo y un nerviosismo anormal. Pero... ¿Acaso soy la única que piensa que algo anda mal con esos bichos? Más allá de que sean repugnantes plastas saltarinas y viscosas... ¿no traen consigo una especie de atmósfera sospechosa? Si yo fuera umbandista diría que están poseídos por el diablo. Me acuerdo de esa película con Sandra Bullock y Nicole Kidman, que son brujas y matan al novio de esta última, pero él revive y la casa se llena de sapos. Uno de ellos vomita el anillo del tipo! El punto es que aunque sea un director de cine, o quien haya inventado esa escena, los asoció al horror, a lo tétrico.

Miren esa mirada, por Dios. No pueden venirme con el argumento de "ay, un sapo ve una persona y sale corriendo, pedazo de grandota!", porque no es una cuestión de tamaño. El sapo sabe que jamás, repito, jamás, le voy (le vamos) a poner encima ni el dedo meñique del pie. Es más, uno de mis más grandes miedo es, algún día desgraciado y apocalíptico, pisar un sapo y que todas sus tripas salten hacia los costados, como cuando los autos los pisan. De hecho, en casa no habría tantas luces exteriores si yo no gritara de terror cada noche de verano.


En Camerún habita la rana más grande del mundo: La rana goliath. Llega a medir 33 cm de largo y pesar 3 kg. Puede saltar tres metros en un solo salto. Si algún día, más desgraciado y apocalíptico que cualquiera, llegara a tener que ir a Camerún, seguramente me lo cruzaría. Y me miraría con odio, porque siendo el rey de los anuros conoce todo sobre sus hermanos y sabe que los detesto, para luego saltarme encima y llenarme de baba venenosa de sapo asesino. Y yo moriría gritando de miedo y asco, mientras él croa en señal de triunfo, y su garganta se infla asquerosamente. Por eso, en cuanto logre independencia económica me voy a mudar a uno de estos lugares pintados de gris donde, según Wikipedia, no hay anuros:



Por: Mitocondria.

sábado, 5 de septiembre de 2009

necesito decirlo...


perdon...me hago cargo y me banco q me critiquen q no escribi nada aca abajo.....
pero lo dejo a libre interpretacion de consumidor...(siempre el consumidor por favor)--
odio la television....
que empieze la catarsis...
...

Madre de Niño de Escuela.


Existen en este planeta diversas formas de vida, como flores en un inmenso campo poblado. Se balancean con el viento suave, se retuercen con las tormentas de invierno sujetándose fuerte para no volarse. La diversidad, oh maravilla.

Por donde sea que se ande se pueden encontrar espécimenes tan distintos que parece imposible que convivan. Pero conviven. A duras penas logran sobrellevar el desafío inmenso que es el día a día.

Una de las especies de seres más curiosas es la Madre de Niño de Escuela. Algunos especialistas en el tema consideran que no son una especie aparte, sino que es simplemente una etapa en la vida de toda madre. Porque, claro, toda madre fue madre de un niño en edad escolar. Y, si tuvo suerte, le compró la merienda, le planchó la moña y lo acompañó a la puerta de la escuela. Pero creo que estamos hablando de otra cosa: La verdadera Madre de Niño de Escuela (MNE) es algo más que una madre cálida y dedicada. Es casi una loca psicópata adicta a su hijo. Es una cocainómaca que ve polvito blanco sobre la piel de su crío. Es una clelptómana cuyo más preciado tesoro es su nene de oro.

La MNE pasa cada día de su vida dedicada a su hijo sea el niño más lindo de la escuela. A que tenga la túnica más blanca (porque ella pasa el desafío ACE y le pega tres cachotes a Fabián Gianola), la moña más grandota y más perfecta, la merienda siempre lista y ese peinado raya al medio que lo deja en evidencia ante todos los compañeritos.

En realidad, durante casi todos los días del año, la MNE no pasa más que por una madre dedicada. La verdadera prueba de fuego está en esos días especiales. Hablamos, claro está, de dos tipos de acontecimientos: Los actos en fechas patrias y algún tipo de fecha especial de entrega de útiles, o alguna de esas bobadas que hacen para el día del abuelo. Después está la vedette de las fechas especiales, que es la fiesta de fin de año. Ahí, la MNE se relame como un felino a punto de comer su ración del día. Se siente en su medio como renacuajo recién salido de esos huevitos gomosos asquerosos. Acecha desde los rincones y no duda en atacar.

A todas estas fechas especiales la MNE irá perfumada, pintada rabiosamente, con su mejor aspecto de madre impecable. Intentará llegar temprano para ser la primera, y si no lo logra pechará a todo padre que le impida serlo. Mientras se abre camino entrando al aula, que nunca es suficientemente grande para acogerlos a todos, ella irá sacando cogote, poniéndose en puntillas para saludar a su hijito, que está ahí, en el medio del salón, sentado. Son las dos de la tarde, y su hijo entró a la una a la escuela. Sí, hace una hora que no lo ven. Pero... ¡cómo no saludarlo, aunque tenga que dar codazos y empujones!

Después de estar correctamente ubicada, de haberle hecho una seña amistosa a la maestra (que es su amiga, claro está), ellas meten una mano en la cartera y sacan la cámara de fotos. Por supuesto, toda ocasión que tenga a su nene como protagonista (¿Ah, cómo? ¿Su nene no es el protagonista? Debió mirar mal, señora) tiene que ser debidamente documentada. Así que mientras los treinta niños más sus treinta padres (más de uno MNE), más la maestra y la practicante se apretujan dentro de un salón minúsculo lleno de dibujos de colores que empieza a oler a ser humano, ellas se mueven de una punta a otra sacando fotos desde todos los ángulos. Ay, foto con el compañerito de banco. Foto jugando al tetris en la compu del Plan CEIBAL. Foto sonriendo. Foto haciéndose el distraído. Foto recitando un poema de Juana de Ibarbourou que ya sabemos todos de memoria pero que hay que escuchar hasta el cansancio.

Nunca es suficiente. Todo se potencia si, por esas cosas que tiene la vida, el niño es abanderado. ¡Dios nos libre! El ego de esa madre la infla tanto que se le saltan los botones de la blusa. Ahí sí, que a ninguna yegua madre de niño escolta se le ocurra adelantarse a sacarle fotos a su hijo que va a estar toda su vida detrás del suyo. Y cuando su nene sea llamado por el micrófono, cuando camine a ponerse delante de la bandera, ella se meterá delante de todos y llenará la mita de la memoria de la cámara con fotos toditas iguales.

La MNE es una plaga de la sociedad. Es un perfecto ejemplo de porqué estamos como estamos. Es, indefectiblemente, una convencida de que su hijo tiene potencial de Núcleo. Nunca aceptará que sea delegado a un segundo lugar. Nunca lo dejaría ser Mitocondria. Y si pasa, porque ningún hijo es niño para siempre, ella se sentirá profundamente desepcionada. Un día, veinte años después de aquella fiesta de fin de año, se pone a mirar fotos y lo encuentra allí, con su peinado raya al medio, parado frente a la bandera. Y se pregunta qué hizo mal.
Por: Mitocondria.

viernes, 4 de septiembre de 2009

anaerobias...


21/09/08

En este mundo en que la ciencia avanza y engaña, en que cualquiera consume cualquier cosa siempre y cuando aparezca un papafrito con túnica y estetoscopio diciendo que "la bacteria Bilius Gyschgwaschen normaliza el tránsito lento, te pone quinta y te cagás parado", ya nada nos sorprende. Todos los aspectos de la vida están virado vertiginosamente hacia una vida mejor. Usted se preguntará: ¿mejor para quien? Pues desde este humilde espacio le diremos que esa es justamente la pregunta que uno jamás debe hacerse, al menos para no caer en la cuenta de lo macabro que puede ser todo.
En esta entrega, que asumimos estuvo un poco demorada a causa de algunas cuestiones de índole estudiantil y/o/quizás laboral, vamos a hablar de la nueva invención de la ciencia moderna (perdón, Ciencia Moderna): el/la profesor/a anaerobi@. Le recordamos a nuestros lectores que un organismo anaerobio es uno que no necesita del oxígeno para subsistir.
Pues bien, Laboratorios Helgarca Houston Taylor, HHT, de Estados Unidos, ha desarrollado un nuevo modelo de profesor que no necesita del oxígeno para sobrevivir. Este nuevo invento científico, logrado luego de años de experimentación y 5034 profesores de prueba muertos en el intento (algunas fuentes hablan de que los mismos fueron llevados a la base de operaciones invitándolos a un curso sobre "Las diez formas más efectivas de ser un sorete y que no se note", pero nada ha sido corroborado), supondría el fin de la inefectividad docente.
"Gracias a este nuevo modelo de profesor- opina el biólogo Wolfarck Hilaryclinton- estamos en condiciones de afirmar que nuestros jóvenes asistirán a clases en que su profesor no dejará de hablar nunca, dado que no necesita parar para tomar aire"
Aparentemente el equipo de científicos que trabajaron arduamente en este nuevo diseño de docente habría extirpado los pulmones de los profesores, implantando un complejo sistema que se carga cada noche enchufándose a 220.
"Básicamente lo que hicimos fue implantar en la caja torácica una gran batería que se puede enchufar en cualquier sitio, cada noche cuando el profesor se va a dormir. Esta batería está dotada de un complejísimo sistema que provee de energía y nutrientes a todas las células del cuerpo, dejando sin efecto la necesidad de respirar. Ahora las fosas nasales son utilizadas únicamente para olfatear."
Pero esta brillante invención trajo un inconveniente a los científicos: comenzaron a tener un exceso de pulmones y vías respiratorias extirpados que no daban a basto desechando. Fue entonces cuando unas empresa de sopas, caldos concentrados y cremas se acercó a Laboratorios HHT para presentar una solución definitiva.
"Desde que se acercaron a nosotros con una propuesta de negocios imposible de rechazar - cuenta el doctor Hilaryclinton- toda la población mundial apreció lo sabrosos que se han vuelto los clásicos caldo Knorr de gallina".
Con este obstáculo superado, Laboratorios HHT estaba en condiciones de anunciar que el éxito era un hecho. Y, por cierto, lo es. Los profesores anaerobios han llegado ya a los rincones más remotos del globo. En esta oportunidad nos trasladamos hasta una institución de formación docente en Montevideo, Uruguay, donde se comentaba que ejercía una profesora pionera en la materia. Ella no quiso dar su nombre, puesto que no le ha dicho a nadie que ya no posee pulmones, pero sí accedió a concedernos una breve nota.
Nos cuenta: "Me contacté con el doctor Hilaryclinton, presidente de Laboratorios HHT, hace ya varios años. Fui de las primeras en ofrecerse para el experimento, y afortunadamente sobreviví, a diferencia de algunos compañeros míos. Desde ese momento mis clases han resultado mucho más provechosas, verdad? Logro hablar casi de corrido, sin pausas, de tal forma que jamás, he dicho JAMÁS, me atraso en los programas. Eso es todo un avance para los docentes..."
Efectivamente, sus clases parecen dictarse de corrido sin señal alguna de respiración por su parte. De forma paralela se ha incrementado el consumo de Perifar 400 por parte del alumnado, sobretodo en los minutos que siguen al final de sus clases. "Es que es algo nuevo... todo lleva un tiempo hasta que las personas se acostumbran, verdad?"
Con este artículo concluimos la entrega del día de la fecha. Solamente nos queda enviar un saludo caluroso a Cloroplasto, que se encuentra algo alejada de este emprendimiento pero que confiamos regresará, y también dar la bienvenida a una nueva colaboración que hemos decidido llamar Robisoma. Ribosoma: ¡Que esté yendo bien el viaje! Eso se llama tener un culo de aquellos. Buena vida. Feliz primavera!

gram positiva (¿?)


30/08/08
Señores, señoras, seres unicelulares, híbridos, espíritus aquí presentes:Celebramos con agrado la inauguración de este espacio de protesta y expresión donde pretendemos volcar todo aquello que merezca ser nombrado y contado, descrito y dicho.
Para comenzar publicamos una nota publicada recientemente a, quizás, el más desdichado de los seres.
El abuso, la tiranía y la falta de respeto rotunda han hecho que el pobre se encuentre reducido a un conjunto de materia magullada y lastimosa, tal como se aprecia en la foto, tomada minutos antes de la entrevista:
Llego a la casa de Escherichia y toco el timbre. Tiene un portero automático y un labrador Golden.
Me atiende la voz de una mujer, que es quien sale a recibirme y me conduce hacia la casa.- Escherichia está en su cuarto.- Anuncia, y me deja ante la puerta de su habitación. Entro. E.Coli está en una silla de ruedas, al lado de una estufa a leña. En realidad, supongo que es ella, pues los vendajes solo dejan ver parte de su cara.
- Buenas tardes, Esche (le puedo decir Esche?). Soy Samantha Hapkckingkgs para The New Scientific Magazine.
- Buenas tardes, Samantha. Tomá asiento, pero antes retirá el inhalador que lo tengo que usar en media hora.
Gracias.Me siento.
- Esche, el mundo está conmocionado con su estado. Está casi moribunda... ¿porqué, Esche, porqué?
- Ah, Samantha... es una gran ironía de la vida. En Wikipedia dice "Escherichia coli (E. coli) es quizás el organismo procarionte más estudiado por el ser humano". Y ese es el gran karma de mi vida: el ser humano.
- ¿¡Usted quiere decir que cuando oímos decir que X investigación fue realizada con E. Coli... hablaban solamente de usted!?
- Así es, mi vieja. Tengo 142 años y más laboratorio que Pasteur. Lo del conejillo de Indias es un invento para no revelar la cruel verdad...
- ¿De cuántos experimentos ha sido víctima, Esche?
- 9810, si la memoria no me falla. Me quedé manca después de los ensayos para descubrir cómo se replica el ADN. Después hicieron todas las pruebas existentes para ver cómo muta el ADN y me nacieron 5 tentáculos en la cabeza. Ahora me los peino para atrás y no se nota, pero por mucho tiempo me acomplejaban y no lograba conseguir novio. Por suerte llegó Escherichio, mi finado marido, que comprendió lo que me había pasado. Pero todo duró muy poco, porque una noche después de que me utilizaran para crear organismos transgénicos, se les quedó adentro mío un gen de león y sin saber lo que hacía me lo comí. Por suerte con Felicia, mi empleada, pudimos hacer como que se había muerto fagocitado por un macrófago.
- Que dura ha sido su vida, Esche. No puedo imaginar cuanto dolor siente. Y ahora, ¿siguen usándola?
- Ahora no tanto, porque hay otras cosas de moda. Mi pobre amigo el Lactobacilo Gorbach Golin se las está viendo negras últimamente. A mí me están por jubilar, dicen que cuando cumpla los 150 me dan de baja. Estoy contenta.
- ¿Y el gen de león en qué quedó?
- Ah, no pasó nada más. Nunca lo sacaron y por mucho tiempo me daba por rugir antes de lavarme los dientes (en ese momento aún conservaba la mitad de mi dentadura. Ahora ya no hace falta que me lave nada). Me creció una melena encima de los tentáculos, lo cual no me molestó porque los disimulaba. Igual seguí sin encontrar novio. Creo que les molestaba el olor que emanaba cuando, en otra oportunidad, me introdujeron genes de pescado. Ahora no los tengo más, por suerte, no aguantaba más las escamas.
- ¿Nunca se levantó en protesta? ¿Nunca denunció el maltrato?
- Sí... en el 2003 me encadené a un tubo de ensayo en un laboratorio de Estados Unidos, pero mi protesta concluyó con el término de la secuenciación den genoma humano, y no me dieron mucha bola...
- ¿Qué le diría a otras Escherichias Coli más jóvenes que puedan estar leyendo?
- ¡Corran!
- Gracias, Esche. Esperamos con esta entrevista contribuir a la concientización de la población acerca del abuso que representa su estado y su historia de vida. Por favor, un saludo para los lectores...- Salud, lectores. Recuerden que estamos dentro del intestino de todos ustedes... no se descuiden, que cuando nos cansemos de esto les podemos producir desde meningitis hasta neumonía.
¡Hasta la victoria siempre!

ando convers...





  • el 300 se empieza a llenar…una tras otra las personas van subiendo…Walter pide asiento para ese viejito con bastón…Don Pedro ni siquiera le agradeció el gesto, acomodó el bastón entre las piernas, se colocó la boina de cuadros sobre el pelo blanco nieve y refunfuñó entre dientes algo de que Uruguay era un hervidero de vicios, y que donde había quedado aquella bendita ley de cero tolerancia a vagos y maleantes. Y se aferró al bastón, golpeando rítmicamente el suelo con él, tac, tac, tac, tac...Sumido en tan profundas reflexiones, don Pedro no se dio cuenta de que acababa de entrar Rocío en el 300, con una enorme barriga llena de vida, encorvada hacia atrás y sudando, embarazadísima…Walter hace su trabajo como siempre y mientras tanto piensa lo mismo de siempre…odio este trabajo….odio este trabajo…y pide asiento una vez más…Ni don Pedro ni nadie se dignó a cederle el asiento, y mira que a Rocío le molestaba dar lástima por estar embarazada, pero es que no se podía cargar así un niño, y eran dos en el cuerpo de uno y no había aire... Rocío se estaba poniendo blanca, blanca, y manoteaba sin fuerzas el aire denso, cortándolo, intentado agarrarse como podía a las barras metálicas. Walter vio la cara y descompuesta de Rocío. Se levantó, y le abanicó como pudo con el diario que estaba a punto de comenzar a leer.…….RETICULA……





  • lindo espacio este....por favor mitocondria estas pintada...ni una nota nueva....no me creo q estas estudiando bioquimica...vos estas en algo raro...voy a leer el papel que me dieron en la calle "10 pautas para saber si su hijo se droga"...a ver si andas en esa....me gustaria leer el "10 pautas para saber si sus amigos estan en el pare de sufrir"-----donde lo encuentro???gracias y no dejen de soñar!!!


  • ….RETICULA….




  • ¡Pero del Pare de sufrir sí que no soy, caramba! Del Opus todavía... ¡pero del pare de sufrir no! A lo sumo una vez le compré unos caramelos al que vende en la puerta del Pare de Sufrir de Gutiérrez Ruiz, pero eso no cuenta. No me hagan enojar, o cuento que ustedes son de la Secta de Hermanas Acamelladas de Biología. Carajo.Yo no las conozco.No, no. En serio. Aparecieron acá de la nada. No tengo ni idea de quiénes son.
    ….MITOCONDRIA

    Eh... oíme una cosa, RETICULA de pacotillas, la vida de los que luchamos contra la tiranía de los profesores de formación docente no es fácil. Quiero que lo sepas. Aunque deberías, dado que vos luchás contra otras tiranías.Porque habrán cambiado los nombres, las curvaturas (de espaldas y de panzas), habráán cambiado los pelos rubios duros y los verdaaaadddd, pero las tiranías son parecidas. Por eso es que hay que luchar, para derrocar el imperio de ellos, los del Lado Oscuro (?).Por otro lado... consideré lo del Pare de Sufrir, pero me di cuenta de que no era lo mío. Bah, ellos se dieron cuenta antes que yo. ¡Que digo ellos! En realidad fue su campo magnético repulsor de intrusos de la fe el que me echó. Estaba yo poniendo un pie dentro de uno de sus templos cuando me vi ropulsada hacia atrás por una fuerza poderosa e invisible, que me estroló contra un puesto de revistas en la vereda de en frente. Teminé con el culo Pampita en la cabeza y unos cuantos moretones. Por las dudas, no te lo recomiendo
    MITOCONDRIA




  • ....si superas vos lo que disfruto con todo esto...me llena el alma saber que no es la droga la que se entromete en tu vida libre y digna del señor....pequeñuela sierva del señor...libre de vicios...esa fue la primera impresión...en el pare de sufrir nos caracterizamos por exorcizar a la gente antes de entrar...así quedan anonadados y colaboran mas...digo...mejor...no dejes de intentar ingresar por la puerta principal...porque si no me equivoco..(me conto el negrito de la puerta, si siii el desgraciadito ese que se enfermo y se curó de sida 7 veces!!) que chocaste contra el vidrio de la puerta ventana...por ahi NO se entra!!te esperamos y te invitamos a celebrar el gran camino de merca que estamos organizando...vengan a inhalar!!recuerda hija del señor....vulnerable...POR LA PUERTA PRINCIPALLLLLLLLLL!!!!!!!!!!!!!!DIOS-AMOR-PAZ-CAPITALISMO



RETICULA….